sábado, 18 de julio de 2009

>.07

Nota del 17 de agosto. A partir de este post se termina el formato de Números y regresamos a la programacion no tan habitual de siempre. Esto era planeado para el séptimo número, que no existió, ni existirá...

De una oscura Barranca, salieron todas las víboras de Mixcoac para poner a San Antonio de cabeza y morder a San Pedro, quien estaba oculto entre los frondosos Pinos, para luego toparse en el camino con los viejos mártires de Tacubaya, quienes vueltos a la vida cual zombies impedirían que sus archienemigos los Constituyentes consiguieran el Auditorio, pero caerían derrotados gracias a la turba reptil en las calles de Polanco. Al ver a tanta serpiente arrastrarse entre los huesos esparcidos en el asfalto, los vecinos de tan pudiente zona estaban tan sorprendidos como espantados, implorandole hasta a San Joaquín para que se marcharan... hasta Cuba si fuera preciso. Pero las traviesas viboras prefirieron perforar con sus enormes y fuertes colmillos los tanques de la vieja Refinería, para después invadir un restaurante y meterles un susto a los comensales que degustaban su coctel de Camarones, y de paso, comer, claro esta. pero su coco les llegó, encarnado en la figura de don Aquiles Serdan, quien dió fin a tanta fechoría encerrando a las serpientes, por lo que a su muerte, todo el pueblo le rezaría un emotivo Rosario

1 comentario:

Gabriela dijo...

ya deja de hacerte el sufrido
luego por emos como tu los verdaderos depresivos quedamos mal
ajaajjaja :)
shame on you no te mereces karma police!