Suburbano (I)

Después de una larga espera de todos los skyscrapers del foro donde participo (creo que fueron como cuatro meses...), y los que se metieron nomás a curiosear o a preguntarse algo acerca del patético autor de este blog, aquí está un minireporte acerca de una de esas obras que llego, incluso a fascinarme: El tren suburbano

En el sexenio de Fox (¿tenías que recordarlo?) empezaron a anunciar por cuanto medio tuviera a su alcance el gobierno federal, la construcción de esta obra. Al principio, no le había dado mucha importancia, pero un buen día, surgió esa vieja curiosidad infantil por el transporte público (en especial el metro) y me puse a indagar acerca de las obras y todo. Así fue como encontré SkyScraperCity, un foro donde tenían un thread acerca del proyecto.

Poco a poco me fui involucrando más y dejé de visitar el foro por el hecho de que me habían mandado a buscar trabajo al acabar la vocacional. Pero durante el tiempo que estuve activo por el foro, coloqué fotos y propuestas y en general, todos en el foro suelen tener una participación más o menos activa.

En fin, volviendo al reporte y dejándome de mis desvaríos, la licitación del tren estuvo llena de desencuentros dignos de telenovela política. Luego de una revisión, quedaron como finalistas del proceso la francesa Alstom y la española CAF, a quien el gobierno del DF ya la trae entre ojos por las fallas en los trenes que le dieron a la línea 2 del Metro.

La favorita para ganar era Alstom, quien ya saboreaba las mieles de quedarse con la flamante concesión de 30 años de operación del suburbano hasta que... ¡Zas!, descubrieron que su propuesta tenía una falla técnica y que además, el hijastro de Fox tiene presencia en la compañía. Entonces, la SCT convocó a un nuevo concurso, donde CAF aprovechó la debilidad manifiesta de Alstom y acabó quedándose con la concesión, la cual le generará grandes márgenes de utilidad.

Tras licitar la concesión, se procedió a acondicionar la vieja terminal de trenes de Buenavista, que no operaba desde 1999. No se demolió en su totalidad, ya que está catalogada como monumento histórico, pero los viejos andenes fueron tirados. Son escenas que dan tristeza, porque ¿Cuantos de nosotros no anhelamos viajar (o viajamos) en tren?.

Así eran los andenes

Demolición

Para 2006 la construcción ya avanzaba, pero a paso muy lento. Había que construir la estructura del nuevo salón de llegada de trenes y también, el centro comercial que estará alojado arriba de la estación. Se había presentado también el tren que correría por la nueva línea, una variación de los utilizados en los trenes de cercanías de España. Este modelo había sido protagonista de los atentados en Madrid el 11 de marzo de 2003 y en tierras ibéricas empezaron a causar, desde esa fecha, una impresión de miedo, hasta que fueron sustituidos por un modelo más vanguardista, llamado Civia.

447 que utilizará el tren suburbano (Carro motor M1. 0103)

Se llegó a sospechar, debido a la retirada de estos modelos en España, que los trenes a utilizar en el suburbano mexicano serían usados, de segunda, en una operación denominada leasing entre RENFE (la operadora de los trenes de cercanías en España) y Ferrocarriles Suburbanos. Pero tiempo después se aclaró que estos modelos serían de nueva construcción.

Si las obras en Buenavista iban a paso lento, en el resto de las estaciones, el avance era mínimo. Se retiraron las viejas catenarias del ferrocarril a Nuevo Laredo (vía que usará el tren suburbano) y se instalaron nuevas. También se colocaron nuevas vías con el ancho del 447. Comenzó a bardearse la zona, se construyeron los talleres cerca de la estación de carga de Pantaco y, conforme llegaran los convoyes, se iban haciendo las primeras pruebas. Un día, me metí hasta la zona de obras cerca de Pantaco y pude captar con la cámara de mi celular una de las pruebas del convoy M1. 0101



Este reporte continuará...

Polvo

Polvo - Janik Ramírez

Extraviándome
voy entre una fría luna
sin mapa,
ni destino
solo camino
despojándome de consciencias y días felices
soy

una ruina

itinerante por el espacio desconocido,

ceniza andante y fresca

dispersa a la sombra de la luz lejana
y así me encontraste
como polvo viajero a la deriva
y en tu mano

volví a ser yo.

Los múltiples desvaríos (I)

He estado colaborando de manera más o menos activa en un foro virtual sobre transporte público en un sitio llamado SkyScraperCity (http://www.skyscrapercity.com), discutiendo temas como las ampliaciones del metro, el nuevo tren suburbano (que por cierto, ya se anda diciendo que se inaugura incompleto, es decir, no será en un principio de Buenavista a Cuautitlán de Romero Rubio, sino que solo llegará a Lechería, en Cuautitlán Izcalli. Según algunos foristas, dicen que la estación Cuautitlán no lleva mucho de avance, como un 30%).

Estos tópicos, si bien afectan directamente a la población de la zona norponiente, la mayoría ni se pone a pensar en eso "Déjenselo al gobierno, tengo cosas más importantes que hacer", suelen pensar mientras ven todos los días el mismo trayecto en el camión hacia una estación del metro que se vislumbra muy lejos por los embotellamientos tan frecuentes, en lugar de participar actívamente en los proyectos y exigir que se terminen al 100%.

En cuestiones de mi vida, pues no hay mucho que decir. Ahora volví a trabajar en un café internet, esta vez ubicado enfrente de la Ciudad Deportiva. Me empiezo a hacer conocido por el rumbo (de hecho, la colonia donde se ubica es vecina de donde vive... ustedes saben). El trabajo me gusta, y eso que antes no me parecía mucho eso de las labores de limpieza, termine acostumbrándome. Es realmente entretenido componer computadoras, se gana dinero y aparte, cada equipo es como una nueva misión por superar (no se por qué uso terminología gamer...). He querido instalar C++ o BASIC en el servidor (porque meterle Linux, ni pensarlo) y ponerme a programar un rato (la programación es otra cosa que encuentro interesante), pero está muy lento (es un Pentium III con 128 MB de RAM y tiene programas pesados como Autocad o CorelDRAW Graphics Suite) y de que se puede colapsar, se puede colapsar.

Hoy estoy aprovechando el tiempo para bajarme una distro de Linux. Es para instalar en mi casa, se trata de la Mandrake 10.1 (Official, porque la community es la beta). Tengo la 9.2 (por cierto, ¿alguien la quiere?), pero como mi lector de CD es LG, no puede ni siquiera pasar de la pantalla de inicio. Si, he tenido algunas complicaciones para bajarla, pero en estos momentos, ya estoy terminando con el CD 2 de la 10.1 y voy a ver si alcanzo el CD 3. Vaya logro, eso si que es felicidad.

Y tal vez algunos inávidos lectores se preguntarán ¿Y tus textos? Pues no he tenido tiempo para escribir, pero se que ya urgen nuevos posts literarios. Le debo a Manu, un amigo argentino, el quinto capítulo de La torre, y además, me hace falta escribir más cuentos, porque siento que lo poético me está absorbiendo cual matrimonio jabón-esponja.

Los fines de semana vago, sí, agarro cualquier metro (Indios Verdes o Ciudad Azteca) y dejo que mi inconsciencia funcional me lleve a cualquier parte lejos de mi hogar. En el trayecto miro el paisaje, leo, escribo, pienso en cualquier cantidad de cosas: música, libros, procesadores, service packs, cuentos, chistes con acertijo implícito, política... en fin.

No les diré lo que próximamente habrá en este blog, ya que, sinceramente, puedo poner otro desvarío...

No se que fregados me sucede...

Hoy mi vida vuelve a tener algo de normal. Mi último trabajo (ser maestro en una escuela tipo CCPM) me fastidió sobremanera. No es nada agradable salir a un punto de afluencia a volantear para reclutar alumnos, vendiéndoles una idea casi totalmente falsa. Y yo, preocupándome porque aprendan a aplicar fórmulas en Excel, o que supieran programar en Visual Basic y no solo aprender a copiar código a lo imbécil, para que al final, bajo el pretexto de que yo corría alumnos, me sacaran...

Pero no sé que fregados me sucede.

No puede pasar un día sin que escuche una canción, pero no se trata de algún track del nuevo CD de Radiohead In rainbows, o alguna rola desconocida que tocaran en Ibero. La canción es... ¡Si tu no vuelves, en versión de Amaral y Chetes!... aaaaarrrghh. Creo que medio me conozco (sí, medio, porque luego hasta me doy autosorpresas) y se que cuando no puedo dejar de escuchar una canción pop es por una simple razón: estoy enamorado. No hay de otra.

(Antes de continuar, recomiendo leer el post Fabiola de este blog)

Y no se por qué siempre tiene que ser la música pop, porque la mayoria de mis novias han sido aproximaciones a Barbies, por la excesiva popularidad de estos ritmos, traducida en oírlas en la micro, con los vendedores ambulantes, cuando no están poniendo las gruperas de cajón... no lo sé.

Ahora, ya sin trabajo (again...), volví a colgar el traje, soy de nuevo el tipo de pantalón de mezclilla roto que lleva dos semanas sin lavar, que le encanta vagar sin rumbo mientras tiene problemas pendientes por solucionar (deudas, desempleo...). Otra vez vuelvo a ser un poeta fracasado...

P.D.: Ya me harté de mi foto, próximamente la cambiaré...

Fabiola

Este poema está dedicado para alguien muy especial. Ella es estudiante de gastronomía y me ha robado el corazón. Se que únicamente son palabras, que a la mejor literariamente esta cagado y que tal vez la chica no logre ver este blog, pero creo que cuando algo se hace con amor, uno no se fija totalmente en la estructura del texto, solo piensa en la otra persona...

Fabiola - Janik Ramírez

Tú
que cocinas a la noche
con el fuego lento de tus brazos
y la endulzas
con un poco de esos ojos
que bañan sueños recién horneados,
inconsciencia romántica degustada
entre lunas
que siembran días frescos por las nubes,
cosecha diurna que arrancas de tajo
antes de crear
otra receta del amor.

Monologando pensé...

que soy un vil fracaso. Y no lo digo en vano. Luego de que el café internet donde laboraba fue asaltado, decidí volver a buscar trabajo (por lo menos mientras reabría el negocio) y, por un milagro, recibí una llamada de la primer escuela donde solicité trabajo de maestro. La llamada fue un milagro, pues estaba conectado a Internet vía módem y la llamada entró. De inmediato me alisté para presentarme en el lugar, una escuela de computación similar al CCPM ubicada relativamente cerca de mi casa y tras una breve explicación de lo que haría, comencé a trabajar. Pero mi ánimo se derrumbó al saber que en todos los grupos cada alumno estaba viendo cosas distintas: que uno veía Word, otro Excel, otro Visual Basic y así; lo otro que me quitó el ánimo fue el horario tan pesado (7:00 a 20:30 hrs. de lunes a viernes y sábado de 8:00 a 12:00 hrs) y el hecho de que, aparte de dar clases, tendría que reclutar alumnos en puntos de afluencia, dándoles informes, vendiendo una idea demasiado fraudulenta (computadoras en mal estado, sin los programas necesarios, instalaciones deplorables, enseñanza deficiente y por un precio donde los alumnos no se comprometían a aprender). Mi modo de trabajar, simplemente a algunos no les pareció (a la mayoria les vale madre y creen que el maestro es el responsable de su aprendizaje tan solo por pagar una cantidad de dinero) y se dieron de baja. Lo que más me enoja es que esta situación se sabía desde el jueves (día que falte por arreglar un problema) y, el director (quien además es el maestro de inglés y una persona que no tiene respeto por la clase de otros, ya que se metía cuando le daba la gana y sin tocar la puerta para empezar a platicar con las chicas) ni siquiera tuvo el valor de decirme lo que pasaba lo antes posible. El milagro entonces se había convertido en una especie de fastidio para mi durante la semana en la que debí adaptarme al trabajo.

El lunes, justo cuando la situación empezaba a normalizarse, en mi primer clase de la tarde fui interrumpido para que me comunicaran la noticia de mi despido. Me sentí como si desde un principio hubieran planeado deshacerse de mi (vi un anuncio de vacante en internet y me había encontrado una solicitud de empleo en el escritorio de la recepción). Me despedí de los alumnos y de todo el personal que me encontré y, tras recoger mis cosas, me fui.

Inmeiatamente, me movilicé para buscar otro trabajo. Incluso tenía una cita para ir a la escuela de la competencia (ubicada a una cuadra), donde hice buena relación con el director y le propuse algunas ideas para su plantel (y de paso, derrotar a la escuela de donde me despidieron). El horario era el mismo, pero el ambiente se vió mucho mas agradable. Solo faltaba aclarar lo de mi nombramiento como profesor de parte de la SEP. Esa sería una oportunidad grandiosa para mi desarrollo profesional.

Hoy fui a otra escuela, una secundaria donde solicitaban maestro de computación para primer grado. Me gustó bastante, pero al contrario de la opción anterior, esta escuela se ubica hasta el metro Constituyentes (2 horas de traslado). Se que es muy lejos, pero lo importante es que tengo ganas de trabajar y dejar atrás el fastidio que me provocara ese empleo.

En otros asuntos, llevo dos semanas sin ver a la chica que quiero... y sin establecer contacto con ella. El siguiente post será un poema que le escribí y que incluso, lleva su nombre.

El cadáver del amor

El cadaver del amor - Janik Ramírez

Siento la vida correr

por las manos,

azogue de un deseo rápido

tocándote,

desvaneciendo fantasmas de tu boca

y limpio

todo resto de pasión incrustado

en ti;

el desecho que me forma en una mente

sin pensarme, imaginarme

siquiera como la sobra que carcome el tiempo

augurando

una existencia de muerto entre tus fibras

de cadáver que no siento.